jueves, 29 de abril de 2010

Te lego...

Pero a ti sólo puedo hacerte heredero de aquello que yo tuve... Te lego la poesía. Te lego las estaciones, sobre todo la primavera y el verano; te lego el viento desencadenado, el sol y la luna; te lego el mar apacible, incluso la tierra que habitamos; las montañas, los ríos y las grandes nubes que viajan majestuosas y livianas. Tú las mirarás y tal vez te acuerdes de la breve amistad. Te lego los árboles y los ágiles seres que en ellos moran, el amor, las lágrimas, la alegría, las estrellas; te lego los sonidos, los cantos, los rumores, la voz de las personas, que es la música más armoniosa...

[Fellini Satyricon, de Federico Fellini.
Film del 1969; extracto del minuto 47-48]



Y es inevitable. Cada vez que veo Satyricon, me gusta más, y más. Como todo en Fellini. Un fascinante, exquisito y provechoso redescubrimiento.

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