domingo, 30 de diciembre de 2012


a veces dylan thomas
me sonríe
en esta habitación

jueves, 27 de diciembre de 2012

norte


pienso la ciudad
como un plano aéreo en que detallar
mis catástrofes

utilizo herramientas muy finas
para perforarme las uñas
establezco
el órdago
de todos los pecados
que no he cometido
tres sacerdotes y una paloma
muerta
sobre el pecho de todas las mujeres
a las que no he matado
ni podré matar
nunca

yo estoy aquí y soy un abrigo de nieve
sobre la sonrisa azul
de mi pasado

quizá este sea un buen lugar para quedarme
o quizá no
lo cierto es que

no sé permanecer
en ninguna
parte

[sé que mi casa
ya no es
mi casa]

[establecer la primera
respiración
como clave

el suicidio reiterado]

cuando un niño nace, cierra los ojos
al mundo
por primera vez y luego
grita

esta sonrisa
que se me va hundiendo en los labios
clavando en las sienes desencajando
la mandíbula
para deciros
lo bien
que me siento 
lejos de aquí
por primera vez
en años
vertical sobre mí
porque no sé permanecer:
soy de forma
sostenida y cambiante
pero soy
y por eso puedes
tocarme
con palabras

la boca es una caída
libre
hacia el reino
de dios

[preposición sobre preposición
escribo bajo pretexto, en exceso
con-migo
misma

no escribo]

escucha, tengo miedo de los espacios
vacíos de las letras que se esconden
en los párpados de los coches
de praga de las noches en estación
y las mañanas con la boca
seca

porque jamás volveré a tener
dieciocho años

porque
[estamos vivos
y no nos suicidamos]

entiende
por favor
entiende que nadie me ha puesto suficientes
palabras en la boca
para decirte
lo mucho que temo la transición
de mi cuerpo a la ceniza
que nadie me ha puesto suficientes
palabras en la boca
para pintarte
en los cristales

[ahora]

he tenido que buscarlas, romperme
los dedos
en los cristales e ir definiendo
tus contornos, bajar
el escalpelo
entre las costillas para dejarte
llegar y construirte una casa
junto al lago
salvarte
del silencio
y el ácido

me gusta tanto
sentirte 
así

todas las calles se disuelven en
una única
luz
de
neón
separada del circuito
universal que funde compases

derriba las pulsaciones
derríbame a mí
así
en el barro
porque necesito
sentir que estoy viva
raspar toda la piel abrir las sienes
lavar mi cuerpo
sucio
en agua de tu boca
y dejar de escribir, dejar
de escribir
al borde
coger las manos del doctor
strangelove
y girar girar girar

gritar

desgarrarme de verdad la garganta
o hacerlo tan bajito
en el hueco de tus hombros

una pausa
para detallar el tema de este
poema:
la angustia existencial
es una mentira

niños, no habéis nacido
niños, no queréis morir

no podéis morir
porque no habéis nacido

niños, qué demonios
estáis haciendo
aquí

quién os ha dicho que pudieseis
entrar
en mi cabeza

tic tac en los tejados, en el estómago
de los niños que tienen hambre, blanca
navidad, tic tac en las sienes
de todos los oficinistas, ese teclear
frenético como un profeta
vuelto
sobre

[un párrafo
completo
para hablar
de la ausencia]

tic tac en las estaciones
donde espero
todos los trenes que he perdido

volveré
dentro de diez años con los párpados
transparentes
y todos
podréis veros en mis pupilas
y yo no diré nada, ya no sabré
decir nada

si para entonces el capitán ya no está
si yo ya no estoy
si tengo un trabajo una palabra
un gato lamiéndome
los dedos cuando llegue
a casa
si para entonces ya me he matado
a mí y a todos mis fantasmas
si he leído todas las novelas de vladimir
nabokov
si para entonces ya no me importa
nada y me he olvidado
del presente y vivo
como temo vivir
ahora
en suspenso sobre la palabra que se pronuncia
a continuación
esa sensación de que todo va demasiado
deprisa y que nada
se mueve

entonces
por favor
derríbame en el barro
rápame el pelo y lávame
entera hasta
dejar mi cuerpo
blanco y puro
como el de un bebé

repite
mi nombre
en voz baja


una y otra
vez


[en voz baja]


tú tienes las manos llenas de agua
y los cuerpos se vuelven
firmes si pasan
por tus ojos
los cuerpos
se vuelven cuerpos si pasan
por tus ojos

y cuando
hablas, despierta
la ciudad

Tú tienes
la única
Mayúscula de este
Poema

ich baue

viernes, 14 de diciembre de 2012

die Woche







[si nadie se llamase pavlova
nadie tendría
miedo
de la nieve]


jueves, 13 de diciembre de 2012

normandía


es mucho más fácil
a oscuras
la cabeza a veinte centímetros
bajo el agua
y que los relojes estallen donde nadie
los escuche y que los relojes
sean los cráneos de todas las palabras
que aún no sé decir
de todas las personas a las que todavía
tengo que matar

toda la lluvia y el azul eléctrico
de esta noche se condensa
en una única gota
rompiendo
mi cintura

pero yo me ajusto
las botas
con fuerza
hundo clavos en los tobillos
para sujetarme
a la realidad visceral y absoluta
del cuero
me arrastro
por la arena
con el agua inundándome la camisa
la boca los ojos
hasta que ya no tengo camisa
ni boca ni ojos
y los peces anidan
en las cuencas dobles

vuelvo todas las miradas
contra mí
y no voy a parar
de hacerlo

sábado, 1 de diciembre de 2012

las venas

tienes todo el cuerpo
lleno de flores
rojas
y abiertas
como heridas
exudando vida
derramándose muy despacio
en mis labios también abiertos
mientras se cae la tarde
te caes tú
sobre este
poema
de noche
sin noche

tienes todo el cuerpo
extendido en una alianza
azul
y eres un guerrero
por las estepas
de mi nombre
y en la estepa
hay lobos
y mira cómo aullan
los lobos

(roer mis huesos
las clavículas

hoy he soñado con el vientre
azul de las ballenas)

llevo años
sin dormir
erguida sobre la torre
de vigía
en la que vivimos
los gatos
llevo años
erizada
desviando la vista frente al vértice
al vórtice
imponiendo
el caos
a la esperanza
la locura y la violencia
de vivir si no se sabe

el miedo a la eternidad si no se sabe

y pienso ahora en todas las palabras que no sé decir
cuando todo mi cuerpo
se seca y cae
como caen los pájaros
las máquinas de escribir
y yo bebo agua
en todas las alcantarillas
[de camino a casa]
sosteniendo tantas guerras
contra mí
misma
me mojo toda la cara
la boca
en el agua de las alcantarillas
tira a tira de piel
en verde
ácido
porque no soporto
el blanco
que transluce
las venas

[pon la mano
aquí
¿lo ves?

estoy respirando]

tú vas siempre más allá
de mí
como si me flexionases
sobre mi propio
eje
de
gravedad
e invirtieses los polos que estructuran
la columna
las caderas
los hombros y el órdago
en las costillas

(pierdo
todos
los juicios

el mío, el primero

y no importa
porque tú)

porque tú
vas deconstruyendo la firmeza
del plástico
las costillas
____apretando tan suave
______tan suavemente
________mi cuerpo
____________en este abrazo
________________industrial
___________________que no termina
_________________________y yo puedo ser
una muñeca
azul
en tus manos

lunes, 26 de noviembre de 2012

nieve


yo no soy nadie para juzgar
el derecho a la vida
de nadie
y por ese motivo, porque yo (no) soy nadie
(para juzgar el derecho a la vida de nadie)
es posible concluir
que yo
soy
nadie

podrías traspasarme con los dedos
y la nieve
no te rompería
la garganta

vindicta
o v a secas, es decir:
ahora mismo
bajo este sol sobre esta roca
la temperatura exacta de bonaval mientras te beso
las manos
y todos los meses de noviembre unidos
como un koiné;
nunca me reconozco
en los reflejos, página sobre
página en esta rueda incompleta
imposible
y yo nunca
me reconozco
en los reflejos

(eso ya lo he dicho

pero todo lo que digo
se mantiene
firme en la rueda
en la necesidad
conjunta
y no quiero utilizar símbolos
que eviten la palabra
no quiero
utilizar nada
ser parece un verbo
copulativo y las categorías
no son nada y mi lenguaje
existe
cuando me/te/le/nos
vos/les/?/¡-ñÇ
designo

no soporto el concepto sin pretexto
sin objeto sin prospecto
sin la dosis necesaria
de hiperrealismo
un pico como fuego
azul
en las venas
rompiendo los límites del óvalo-pared
en el que coexisto
conmigo
misma

[las voces
todas
esas
voces]

yo existo
sobre mí
antes y debajo
de mí
con la piel extendida
en los espejos
yo existo sin yo
sin mí
aunque
ahora no sea capaz
de decirme, aunque ahora
sea muy tarde y yo tenga fiebre tenga miedo
tenga la eternidad de todas
las vidas que no puedo
vivir
en la garganta

martes, 20 de noviembre de 2012

(FEDERICO FELLINI y federico fellini

¿o es exactamente al revés?

a las tres de la mañana
se fue la luz
en el aeropuerto)


lunes, 19 de noviembre de 2012

calcetín-nenúfar


las cosas pequeñas
las cosas que todos
hacemos

descubro a las personas
en las cosas
pequeñas
las cosas que todos
hacemos

la manera
de vestirse
o desvestirse
de morder el pan cuando está
caliente o de elegir los calcetines
de escribir un e-mail o maldecir
desde la ventanilla del coche
los ojos muy abiertos contra el cristal
y toda la vida
toda esta vida
nuestra
reventando
en la garganta

porque entender el sí y el signo
y la sibilante
no parece posible
(interdental
significa masticar muy despacio
tus clavículas)

y ahora siento
de verdad siento
un nenúfar violento-violeta
desgarrándome
las costillas
muy despacio
como en un pequeño vals
triste-vienés

(congela este instante en que sibelius
comienza a arrancarme
la piel
viva
a arrancarme
la piel
muy despacio
como en un pequeño vals
de finlandia)

y ahora quiero
de verdad quiero
gritar

los nenúfares se atemorizan
con las flores
de modo que camino a la montaña
y me extiendo
inmensa
sobre las hojas frías
una comunión a plazos
con mis muertes
con todas vuestras muertes

y no tengo miedo

es quizá una de las pocas veces en las que no tengo
miedo a la muerte, supongo que el sentido
último de verme
así
desnuda sobre las hojas frías
no tiene nada que ver con estas palabras
este poema
y supongo, también
que solo sé admitir
mi miedo
a la muerte
cuando no tengo miedo
(escribir como patente
de corso)

naturalmente, escribo con la firme
intención
de mentir

la destrucción del yo es siempre un pretexto
narcisista
y por qué no el narcisismo
por qué no
el poema-campo de batalla
contra mí misma

viernes, 16 de noviembre de 2012

estructura


i will write
it, all the talk of the world
everywhere in this morning, leav-
ing open parentheses sections
for my own accompanyng inner
thoughts - with roars of me
all brain - all world
roaring - vibrating -I put
it down, swiftly, 1000 words
(of pages) compressed into one second
of time

Jack Kerouac

un hexágono de luces perfectas
como proyección de las líneas
y el vacío
royendo despacio el vientre de las mujeres
fáciles

cuando digo fáciles no me refiero
a ninguna clase de aceptación
simple
y sincera
del sexo la violencia
el ansia
[pureza en automático

tú,
baja
ahora
mismo
del coche]

hablo del orgullo enredándose en dagas
cóncavas
la garganta
y el absurdo existencial como
bandera y el pseudointelectualismo
de stravinski y las cosas
complicadas que me generan
un rechazo visceral
a las palabras,
que me brotan del vientre
abierto
el vientre mismo una llaga inmensa
y es decir mucho porque
tengo llagas en las pupilas
llagas cubriéndome los brazos
hendiendo la lengua
desgajando el mecanismo
(reloj de cuco)

las rótulas

soy job
con pecado y culpa
soy job
escupiéndole
en los ojos
a tu dios
una y otra vez

una y otra vez

y no pienso parar de escupirte
no pienso parar de rasgarme
los pezones, hundir
los dedos
(estos dedos llenos de luz
fruta roja asfalto
y semen)
en las costillas
hasta perforar los pulmones, hasta dinamitar
los pulmones
y que sea tanto el aire
en las arterias, tanta la presión
la resistencia en el útero
que yo me disuelva en un discurrir
suave
sin decir nada, sin volver
a gritar así
como grito cuando tengo miedo
y las palabras
afloran
a menos de dos centímetros bajo la piel
cristalizan con este frío de noviembre
me cosen los labios, roban una joyería
inmensa y me detienen
en plena praza da quintana
por estúpida
por sincera
por no saber muy bien qué hago
para estar viva, por no entender
muy bien
qué quiero decir cuando
digo que tengo miedo
que la determinación
de mis pulsaciones
de mi egoísmo
(llamo egoísmo
al deseo
de hacerte feliz)
es demasiado grande y yo
demasiado pequeña
y que quizá
no puedo
cerrar las manos en una curva
elíptica
con la que levantarte
sobre tus tobillos
enterrados en la nieve:
al final
solo sé tirar de ti
hacia arriba
aferrarte por los hombros las axilas
tan frágiles
y llenarte la boca de aire
de sueño
de palabras y cristales
cortando la lengua
la sangre
en tu boca abierta como una alucinación
de gasolina
y éter
todo el mar en llamas sobre nuestras cabezas
mientras grito mao mao mao mao mao
mao mao mao mao mao mao mao
con los ojos cerrados
apretándote muy fuerte
masticas despacio
las heridas del pecho
porque no existe la contención
en este diagrama de las cruces
así que come
mata
bebe todo el vientre
como un cáliz
yermo
sin comienzo ni palabra
porque yo estoy aquí y no vas a hundirte
no vas a hundirte no vas a hundirte
escúchame
no vas a hundirte


al final
solo sé tirar de ti
hacia arriba
izarte sobre la miseria de mis dedos
de bailarina rota
sacar tu cabeza
fuera del agua, fuera del agua-navaja
palabra de artaud
a ciegas


[et moi je danse mao mao]

y así vamos subiendo, así te tapo los oídos
te muerdo los labios te destrozo
los labios y me quemo la piel
de la espalda
hasta el azul-oscuro-casi-negro

[Y VOSOTROS]

puedo describir la hipoxia
el verde en las uñas

te arrastro a la arena,
virgen y azul
como eres
cuando estás desnudo
tan desnudo
y frágil
como yo
cuando estoy
desnuda
y frágil
en los espejos

y eres hermoso de esta manera
o de cualquier otra

o de cualquier otra

domingo, 4 de noviembre de 2012

la vie


[existencialismo barato
muy barato
de otra manera no podría pagar
este pico de fiebre

no un pico de fiebre
más intenso
o menos,
quiero decir

solo eso
el pico de fiebre
necesario
para empezar a escribir

toma uno
o dos
o tres]

estoy todo el tiempo
intentándolo
mientras llueve el cielo
entero y no medio
cielo
(no es fácil
aunque lo parezca)
mientras rompo el azul eléctrico
en los ojos de giuletta masina y a ella
no le duele
pero a mí, sí
a mí sí me duele
en la punta de los dedos
de los pies, en las rodillas
los muslos y la pulpa
azul

(es decir, la inversa del orgasmo

es decir,
nada

y qué es nada si necesito letras
para decir nada)

se rasga el útero
y decir que se rasga el útero
suena muy bien y huele
a sangre
pero la ausencia de significado
es un concepto perenne
que se me viene grande
y cómo puedo yo
seguir intentándolo

permanecer aquí
callada bajo los focos

completar
un círculo
diminuto

bajo los focos
nunca sé cómo se hace
para estar viva
escribo
sin saber escribir y así
con todo

así, con todo

cuando la gente me pregunta qué quiero
ser en la vida
las facciones
se distorsionan
como si todos respirásemos
bajo el agua

y yo sé que no puedo respirar
bajo el agua

quiero decir que tengo
miedo y siempre encuentro
palabras muy grandes
a la altura de lo que la gente
espera que diga, de lo que se supone
que debo decir y yo, al final,
nunca quiero
decir
nada

nunca necesito
decir
nada

si esta vez me entregaseis un silencio
inocente
puro como un bebé
recién nacido
yo lo desenvolvería
muy despacio y utilizaría
los hilos como vendas sobre mi cadáver pasado
y futuro porque existo
sin afirmación posible de la existencia
no estoy muerta
pero lo he estado
antes de empezar el círculo y volveré
al comienzo de este círculo
algún día
y ahora mismo sólo sé que estoy viva
y que cada segundo invertido
es una elección posible o
imposible
del tiempo que me queda
o del que me falta para dar sentido
a esta vida muerte vida muerte vida

(a-rritmia de palabras hundidas
en el esternón)

miércoles, 31 de octubre de 2012

somatizar

(las cosas que me dan miedo)


(Wrongly accused of being, Rebecca Cairns)

domingo, 28 de octubre de 2012

sin darte cuenta

sin dejar que me dé cuenta
atraviesas el iris
en carne viva
revientas el pubis
(la lenta eclosión de las palabras)
la sangre es también muy lenta
sobre las rodillas
sin piel, yo no puedo
explicar
lo que es el dolor húmedo
pero sí puedo levantarme
sobre las falanges rotas
para mirarte desde mi voluntad
y no decir
nada

la disonancia musical es un juego peligroso

si cometes un error,
perdemos todas

y tú,
la primera

[decir con palabras de otro mundo
que esta noche no es de noche
porque vivimos una hora antes y entonces
no vivimos
nunca
y los trenes las cenas de fin de año
los bailes en casa del señor
stein
nos arrollan
con la violencia de una cascada o un siglo
o un bebé sorbiéndome
la vida
con su lengua golosa

los pezones y el sentido
primero
de la existencia]

domingo, 21 de octubre de 2012

trouille


la habitación, mis costillas

diseñar una armonía
diatónica
y esta manía del café
a las cinco cuarenta y siete
de la mañana, esta manía
de no dormir y el frío
perfilando
los huesos
por esta manía de no dormir
en las ventanas, de ser
todas las noches
(incluso esta noche)
un gato
sin uñas sin pelo: un ojo
medio rasgado
cuando los ojos han visto mucho
y detrás de la frente
solo existe
un océano lento
de palabras
descubriendo caminos
levantando la piel
perforando la boca
en un crisol
maravilloso

el gato crece siempre a golpes
muy recios
en el lomo
y nunca puedes estar seguro
de que se ha hecho
mayor y de que ya no necesita
esconderse
en el armario
con el orgullo
un poco herido
porque las casas nuevas
huelen extraño y también
los gatos tienen
miedo

(puedo detenerme solo
cuarenta y siete
segundos
para precisar

pero el gato se queda inmóvil
debajo de las sábanas
hasta el café
de las cinco cuarenta
y siete

(tengo mucho sueño

leer a sade porque nadie entiende
a sade y a todo el mundo
le encanta hablar de sade

yo tampoco estoy segura
de entender a sade
pero sé que le gustaba ser libre
y a mí también
me gusta
ser
libre, y a los gatos,
a ellos les encanta la ventana
y también les gusta
que les acaricies la piel
detrás de las orejas
justo ahí, el invierno, rasgar el frío
como una sinfonía en espiral:
la lluvia
ametrallando
los labios

y trouille
tenía razón)





domingo, 7 de octubre de 2012

isótopos


si la erupción que sepultó
pompeya en el año 79
abrigase las calles
de santiago
con lava y gas y piedras
los arqueólogos me encontrarían
aquí
sola
o no
junto a los coches 
y serían capaces de establecer mis índices
corporales, medirían
los isótopos
de potasio que irradia
la médula:
hasta es posible que descubriesen
la no duplicidad
del cromosoma x

analizarían con máquinas
complejas
las fibras de tu camisa que se han quedado
bajo las uñas, noventa y cinco de algodón
(tan suave)
frente al poliéster
yo respiraría muy quieta
un insecto en ámbar
fingiendo el sueño de mil
ochocientos
años
(tengo práctica,
créeme)
y así no existiría la más mínima
sospecha
de mi indefensión
me extenderían sobre una gran cama blanca con líneas
blancas papeles blancos azulejos blancos
todo el cuerpo rociado de reactivos
violeta azul
FAULKNER

recogerían los objetos inútiles
el libro de carver abierto
en prosser o en el poema
del colibrí, la calefacción a tope,
cansados hasta los huesos, el olor de pólvora
aún en nuestros dedos
pondrían nombres muy largos
___________[con muchos números
__________________[para confundirnos
a los bolígrafos el folleto del códice
los cables y el móvil
vibrando
en una sincronía con todos los gritos
de perra que han roto la historia
la histeria
y ahora hago una pausa
para decirte que no verían
la castaña
diminuta
entre mis dedos
__________________________[probablemente la apretaría muy fuerte,
____________________________el monóxido
_______________________________ los cristales

incluso cuando me abriesen la mano
rígida
y firme sobre el fruto
cuando intentasen separarme los dedos
yo les mordería a todos los ojos
desde mi sueño de dos mil años
sepultada
piedra a piedra;
me levantarían con mi vestido verde
las manos como cuerpos
y sabrían que nunca llevo ropa interior que me gustan
las postales de kioto
que hace frío y por eso me tapo la cara
hasta las cejas
pero no podrían explicar los frutos echando raíces
en mis muñecas
fosilizadas
la savia y la resina
humedeciéndome
la boca
y la sonrisa que me partiría los labios
en el momento mismo
de ser aire porque moriría
como yo quiero morir
es decir
sabiendo
que no sé
que me estoy muriendo
lucharía hasta el final por el último pedazo
de tierra de vida de río
la última gota de agua dinamitando
mis pulmones
y si una vez te juré que no estaba aquí ni para morir
ni para matar
lo decía
con todo el peso de las palabras
yo estoy aquí para delimitar
tus hombros en un arco
de sangre y gritar tan fuerte
en esta acera
donde nadie me escuche
gritar hasta que se me rasgue la garganta
que soy libre
y que estoy
viva

y por eso apretaría tan fuerte
la castaña
el fruto de otoño virgen
contra las falanges
rotas
(una dinamo girando en cualquiera
de nuestros
universos)
no puedo morir porque estoy respirando
y esta verdad absoluta
no niega el invierno
sino que lo invita
a derramarse
en el cáliz de mi pelvis

(los arqueólogos no entenderían
nada
de esto
pero tú
ya
lo sabes)

miércoles, 3 de octubre de 2012

Χάος

el acantilado la cloaca los páramos
qué importa
si levantas la superficie en labor
de arqueóloga
si me levantas entera
sobre el vértice, pliegas las costillas
y comienzas este ejercicio
de llorar en el parque
a las nueve y diez de la mañana
entonces
si me ayudas a arrancarme la piel tira a tira
como en esos frescos del siglo catorce
donde los mártires parecen
niños y yo te enseño las marcas que no
me atrevo a besar

e
l

s
i
l
e
n
c
i
o

entender la desconexión como una necesidad
impuesta por las
circunstancias
y yo no soy
así
como ellos quieren verme como quizá
yo quiero verme a veces
y estoy segura de muy pocas cosas
pero si hay algo que sé
por encima y por delante
incluso
por encima de ilión
virgen
de romper ciudades
de estas manos como cuerpos
hundidos en sangre por encima de estas
manos
sé que respiro
y no me gustan las comparaciones no me gustan
los juicios, jamás
miro los ojos de nadie para rasgar pupilas
porque me bastan estos dieciocho años de diseccionar
las cuerdas vocales
en un afán neurótico por descubrirme

viajo a doce mil pies de altura
con las manos atadas a la espalda

viajo a doce mil pies de altura:
mi cuerpo
es un páramo
que se inunda
y me vierto
dentro de mí como un manantial
inabarcable de semen y agua
coexisto con la incoherencia
de mi(s) sexo(s) y no tengo miedo
porque soy capaz
de seguir gritando con la garganta rota
y raspada
en silencio
a doce mil pies de altura
o enterrada en una pirueta de bataille
sobre mis omóplatos

(me nacen flores 
como balas en el vientre
me nacen orugas en las costillas
y tengo los pechos cargados
de leche para amamantar
a las niñas que nadie quiere
tengo tanto
cuidado
con mis manicomios)


cuando estoy triste
bebo café y odio los jueves y plagio
a fernández mallo
cuando no estoy triste
bebo café y odio los jueves y plagio
a fernández mallo
pero ahora
existo y esta realidad concreta
de las manos como cuerpos
a las nueve y diez de la mañana
este misterio del líquido
amniótico anegándome
los oídos
las manos y llorar
como lloran los niños en el diluvio
universal de las palabras
derribar dublín y utilizar todas las piedras para sepultarme
porque debajo de la tierra sigo sabiendo
quién soy
qué he hecho y qué
quiero
hacer
más allá
de las cuatro paredes rodeándome
la alameda a las nueve y diez
de la mañana, las rodillas
rotas cuando están literalmente rotas
porque no sé correr por las calles
vacías de mí y las lleno a gritos
con la fuerza que me abre los pulmones
revienta los alvéolos interrumpe
la frecuencia cardíaca
tic-tac
no es la fórmula ni lo será
nunca
porque viajo a doce mil pies de altura


Man Ray lo hizo.

viernes, 28 de septiembre de 2012

azul


Suspendo en la vida este libro, quiero que sea mordido por
las cosas exteriores.

Artaud

sobre el frío, la hierba
y el agua clavando agujas

los huesos
soportan menos cuarenta y siete
grados antes de quebrarse

las luces del hospital
nazi como un caleidoscopio
de dolor
azul

(látigo es una palabra terrible
que no cabe
en un
solo

ver-
so

dame
las espuelas y un puñado de dólares
para levantar la mañana
que no quiere despertarse

dame las espuelas y este silencio

el páramo)

ahora mismo
no existe el tiempo y esta es una de esas
frases imbéciles
que los imbéciles
(como yo)
escriben en los grandes
poemas, pero
es cierto, ha ocurrido algo maravilloso
y ahora mismo no existe el tiempo
o yo
en mi singularidad
irrepetible
me he sustraído al tiempo y os miro
a todos desde el tejado de mi hospital
nazi
las botas hasta medio muslo, imagínalo
como una película
de serie z
donde tengo un alien
escondido
bajo las clavículas

el derecho absoluto
a la incoherencia
(y lo ejerzo)

entonces rent y el asco en cada célula,
el rechazo
terminal a la vida y ese temor
sordo
el nacimiento
el sinsentido
y mis labios sorbiendo
la leche que me mantuvo
viva
el olor, el vientre materno
la gloria
de la leche que me mantuvo y me mantiene
viva
rent y el asco:
jamás he estado tan cerca de hacer el amor
con un personaje
de libro

(pero rent existe
porque
me aterra si cierro
los ojos
y respira entre las paredes
de mi cráneo

no respira

respira)

evito leer a artaud cuando escribe sobre las mujeres
y me duele si habla de las palabras
me duele porque mi cerebro funciona así
tejido sobre tejido, las costuras grotescas
que no cubren, que no pueden
cubrir la enfermedad
y esa inexactitud
las palabras escondidas
mis intentos
de ser
simple y las desesperación
demasiada
desesperación

la estantería no existe
mi coca-cola light no existe
la nevera no existe
el libro de artaud no existe
buda buda
BU-DA

(guardo agua para dar de beber
a un ejército
de leprosos con preposiciones
hundidas
en las llagas)

desde el tejado de mi hospital
nazi
sois hormigas diminutas y yo no puedo
demostrar mi existencia
y no me importa, si te hablo
de las avestruces
o del blanco es porque tú sabes
mucho mejor que yo
lo que llevo debajo de la piel
cuando las vías
vibran en las venas
a dos centímetros debajo de la piel

(y sé que no tienes miedo)

si soy mujer-coraza, si he pasado
media vida delimitando
el campo de batalla
ahora que existo sobre las estrellas
es decir
con la cabeza aplastada en el barro
ahora
que el tiempo no significa
tengo palabras simples
para gritar lo que quiero
gritar
porque mi mejor poema
es el silencio, 
las manos
extendidas y el silencio en una espiral
de acoplarse con los miembros pesados
ligeros
volver a casa
cuando la casa viaja entre mis costillas
y la punta
de tus dedos

sábado, 22 de septiembre de 2012

ballenas


lista de la compra:

hoy abrimos las ventanas como si fuese
abril

mi cajera favorita lleva el cristo
crucificado
en la boca y dalí siempre bendice
a los terneros, un escorzo
que deshace la concatenación
universal
de las palabras

nací
encogida sobre mi epicentro
cubierta de líquido amniótico denso
y suave
olía exactamente
igual que mi casa a las tres de la mañana
con dos cervezas
(berliner o heineken)
y trinidad rompiendo la cabeza de muchos mormones,
jodidos mormones que nunca han hecho daño
a nadie y que quizá por eso se merecen la muerte, pero mira
ahí vienen los burgueses
ultracapitalistas y yo doy un trago a la cerveza
te miro y bebo te miro y bebo
te miro y bebo;
quizá cuando aún no había abierto
los ojos
por primera vez
(el momento determinante de mi existencia
en el que todas las células decidieron
tomar aire
en un nanosegundo
industrial)
entonces
desconocía el significado
preciso de soñar tu muerte de muchas
maneras y sentir un vacío
crónico
cóncavo
íntimo
en las costillas al saber que estabas muy cerca
y yo muy lejos
ahora
mientras me envías mensajes torpes o rompes
las señales de humo
ahora
me acuerdo de ti en esta habitación de hospital
nazi
y dibujo ballenas grandes y azules, ballenas
jorobadas y blancas como
granos de arena por tus
pies cansados
dibujo
ballenas en el hueco de las uñas y les construyo
una casa con rocas enormes para que mueran en silencio
sin recordar
su propia existencia

(las ballenas del discovery
también me hacían llorar)

todos los oficinistas bailan al ritmo
de una chacona

nunca volveré a tener
cuatro años, nunca
volveré a vivir el 1998 como una esperanza
convexa
hundiendo la vía láctea, me despierto
húmeda y necesito matar a todos
los fantasmas
que roban voces

los gusanos
se deslizan tras los ojos de mi cajera
favorita y usurpan
sus labios de caucásica normativa, uno
setenta y pelo dentro de los márgenes
estereotípicos de los poemas, algo como cobrizo
o dorado, a veces solo sé
dibujar las golondrinas sobre sus pechos y me da por pensar
que estoy más sola
o menos sola en esta ciudad de piedra
y es una sensación muy extraña la de cambiar
cuando todo y nada
cambia a mi alrededor, el capitán
ha muerto
y no habrá funeral, sobran las palabras
porque falta el valor para trenzarle las venas
con flores e ir celebrando
simposios en su honor, yo no quiero
recordar lo que sigue existiendo
y vuelvo a casa en momentos
de luna por si es demasiado
pronto
o demasiado
tarde

(mi cajera favorita me cobra las cervezas
se equivoca con el cambio y está bien así, está bien el aire
fresco en la nariz y la oscuridad sobre los montes

llamas para decirme
que los jubilados alemanes encabezan la lista de cuerpos
diseccionados en las facultades de andalucía
y yo te cuento que estoy respirando, que soy feliz así, capitán
que soy feliz
aquí
así
que soy feliz
aquí)